Los trastornos de personalidad

¿Qué es un trastorno de personalidad?

La personalidad es una formar de vivenciar e interactuar con nuestro entorno que implica un estilo de percibir, sentir y actuar. La personalidad se manifiesta en todos los niveles de nuestro funcionamiento. Tiene que ver con la forma en que percibimos y pensamos sobre nosotros mismos, los demás y los acontecimientos (cognición), sobre cómo sentimos y respondemos emocionalmente (los afectos) o cómo nos relacionamos con los demás (relaciones interpersonales).

Los trastornos de personalidad se caracterizan por un patrón permanente e inflexible de pensamiento, emociones y comportamiento que se apartan de las expectativas de la cultura comportando malestar para el sujeto. Tienden a iniciarse en la adolescencia o principio de la edad adulta, son estables a lo largo del tiempo y comportan malestar y perjuicios para el sujeto. Estos sujetos suelen presentar dificultades para establecer y mantener relaciones interpersonales y para conseguir un sentido de identidad estable lo que da lugar a dificultades en el funcionamiento social, familiar y laboral. En la mayoría de los casos, con ayuda profesional, suelen mejorar y moderarse a lo largo del tiempo.

Es necesario diferenciar los trastornos de personalidad de las enfermedades psiquiátricas. Estas últimas hacen referencia a un conjunto de síntomas que aparecen en un momento determinado de la biografía de una persona y de manera discreta y limitada en el tiempo. Sería, por ejemplo el caso de un episodio depresivo o un trastorno de pánico. Los trastornos de personalidad hacen referencia a rasgos de carácter estables que no precisan de un desencadenante concreto y describe un patrón general de comportamiento y de experiencia interna que se mantienen en el tiempo.

¿Hay muchos tipos de trastornos de personalidad?

La psiquiatría y la psicología clínica actual han establecido por consenso una serie de categorías que permiten distinguir distintos tipos de trastornos de personalidad. Así, el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM) agrupa los trastornos de personalidad en 3 grandes grupos:

Grupo A. Personalidades extrañas, excéntricas y raras

  • Trastorno paranoide de personalidad
  • Trastorno esquizoide de personalidad
  • Trastorno esquizotípico de personalidad

Grupo B. Personalidades dramáticas, emotivas e impulsivas

  • Trastorno antisocial de personalidad
  • Trastorno límite o borderline de personalidad
  • Trastorno histriónico de personalidad
  • Trastorno narcisista de personalidad

Grupo C. Sujetos ansiosos, temerosos, neuróticos

  • Trastorno evitativo de personalidad
  • Trastorno de personalidad por dependencia
  • Trastorno obsesivo-compulsivo de personalidad

¿Cómo puedo saber si tengo un trastorno de personalidad?

En psiquiatría no disponemos de pruebas diagnósticas definitivas que permitan concluir que un enfermo padece tal o cual trastorno. Por tanto, el método diagnóstico fundamental con el que contamos para realizar el diagnóstico correcto es la entrevista clínica con el paciente y, en algunas ocasiones, sus allegados. El psicodiagnóstico es realizado a lo largo de una o varias sesiones. En ellas se recogen no sólo los aspectos más actuales que han motivado la consulta (por ejemplo, intento de suicidio o alteraciones de la conducta alimentaria) sino también la evolución biográfica del sujeto.

¿Tienen tratamiento los trastornos de personalidad?

El eje del tratamiento de los trastornos de personalidad debe ser la psicoterapia. La psicoterapia puede constituir una oportunidad para una mejor comprensión del origen del malestar emocional del paciente. Esto puede permitir que vayan surgiendo formas de sentir, pensar y actuar menos desadaptativas. Se trata, en definitiva, de que el paciente pueda desarrollar un proyecto identitario sólido y patrones relacionales más adaptativos. Esto permitirá, en definitiva, un mejor funcionamiento laboral, social y familiar. Los resultados de revisiones de investigaciones llevadas a cabo durante la última década, no sólo demuestran la eficacia de las intervenciones psicoterapéuticas, sino que apoyan la tesis de que el eje del tratamiento es la psicoterapia.

No obstante, en algunos casos, es necesario combinar la psicoterapia con el tratamiento psicofarmacológico. No existe un fármaco que actué de forma especifica sobre el trastorno de la personalidad pero los psicofármacos pueden ser muy eficaces en el control de determinados síntomas que pueden ir surgiendo a lo largo de la vida del paciente tales como los episodios depresivos, la sintomatología de ansiedad, los descontroles impulsivos o el consumo de sustancias.

En CPPF tenemos amplia experiencia en el diagnóstico y el tratamiento de los trastornos de personalidad. Trabajamos de manera multidisciplinar (psiquiatría y psicología) para orientar un plan terapéutico individualizado que incluya tanto el abordaje psicoterapéutico del paciente como la prescripción de una tratamiento farmacológico que alivie lo síntomas en aquellos pacientes que pudieran requerirlo.

Un comentario en “Los trastornos de personalidad”

  1. Hola, soy Maria Del Sagrario
    Decirle que he leído hoy su artículo sobre los trastornos de personalidad y me parece muy interesante e importante?
    Este mensaje no sé si es para dar opinión al respecto, perdone si no es así, pero muchas gracias de todos modos, un abrazo

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